Nos vemos jugando

Supongo que la primera entrada tiene que ir sobre el principio ¿o no?

La verdad que aquí en Llume no nos gusta dar nada por supuesto. Hasta se podría decir que nuestro trabajo consiste precisamente en eso. No dar nada por supuesto.

¿Cómo si no íbamos a acompañar procesos creativos? Procesos que justamente consisten en salirnos de nuestro patrón de pensamiento habitual. Trabajamos, pues, lo que se llama el pensamiento divergente o pensamiento lateral. Exploramos nuevos caminos cual aventureros del pensamiento.

¿Empezamos por el principio? ¿O por el final? ¿Qué pasa si no hay principio ni final? ¿Podemos plantearnos una estructura circular? ¿En espiral?

Casi todo el rato nos hacemos preguntas sobre cosas muy obvias. Muchas veces encontramos que no hay respuestas obvias, o que no hay una sola respuesta, o que una respuesta absurda nos puede dar una clave interesante…

Básicamente en Llume jugamos. Promovemos el juego, provocamos el juego, incitamos al juego. Tenemos algunos objetivos con esto: trabajar la creatividad o el potencial creativo de las personas adultas. (Sí, la creatividad se trabaja). Y también, pasarlo bien. Un objetivo importante este último, porque en la sociedad tan productivista que tenemos se nos está olvidando relajarnos, disfrutar, conectar con nuestras propias motivaciones, tener tiempo a aburrirnos y sentirnos en plenitud.

¿Y cómo jugamos? Pues lo hacemos con materiales diferentes, con lenguajes diferentes. Jugamos integrando cuerpo y mente (nunca debió separarse esta díada). Jugamos con propuestas sencillas. Volviendo a lo básico. Recorremos muchos caminos, de lo sensorial a la inteligencia. Practicamos el sentido de humor. Nos aventuramos en habilidades o técnicas que supuestamente no nos pertenecen porque en algún momento de nuestras vidas tuvimos que apartar. Conectamos con otras personas, con otros mundos.

Para luego salir del espacio Llume y seguir jugando en nuestro cotidiano.

Buscando soluciones creativas a esos problemas recurrentes que se nos presentan una y otra vez y con los que nos empeñábamos en repetir siempre la misma respuesta, aunque no funcionara. Salimos al mundo con la energía que da sentirse capaz de hacer cosas diferentes, salimos al mundo como pioneros de nuestras vidas.

Nos vemos por aquí. Jugando.

Volver arriba